martes

a veces bien

mirando la política de contenidos de blogger confirmé que no dice nada acerca de la marihuana. en un momento pensé que podía estar prohibido hablar de eso.
es que, estando bajo sus efectos me di cuenta de dos de ellos
-propicia la conexión entre las personas.
¿en qué sentido? las percepciones se comparten, por ejemplo yo empiezo: qué olor que hay en la casa. y el otro , si, es cierto. hay olor a ajo. yo sigo: sí, a ajo. de donde vendrá? el otro: del pescado qeu hicimso a noche. es verdad! ventilemos. el otro ´: si. -abre la ventana-
todo esto, bajo ciertos efectos del porro ocurre de una manera intensa, y más rápida, y con cierto grado de placer en el hecho de que se produzca. por lo tanto el segundo efecto es que
-favorece el trabajo en equipo. hacemos cosas juntos, pero no solo de a dos, sino en grupos considerables.
un ejemplo es un casamiento en una quinta, en las afueras, cerca de la plata
llegamos y fumamos, estbamos en un jardin con pileta. a los costados unas carpas, al fondo un cantero grande de plantas de marihuana. al llegar temprano, los cinco o seis invitados emprendimos la decoración de las carpas con guirnaldas... en grupo. algunos trajeron las guirnaldas, otros la tijera, otros bancos para subirse encima, se formaron comisiones de parejas que se encargaron de cada carpa y algunos tomaban el trabajo de supervisión, otros de apoyo logístico y otros de ejecución. se generó cierta competencia a ver quién decoraba mejor. rápidamente las carpas quedaron listas , y no solo eso. se inflaron los globos para echarlos a flotar en la pileta. ..
los estupefacientes no son para mí pero a veces bien.

2 comentarios:

Cuki dijo...

Aplaudirte sería superficial. Decirte que me emocionó, creo que un poco menos.

inés dijo...

fue inolvidable!