sigo inquieta con mi defensa del bautismo y poco a poco trato de pensar por qué no me lo puedo sacar de la cabeza.

me preocupa que dentro de las criolladas que se publican en este espacio mi interés por la religión resulte carente de seriedad.

preguntas:
¿se puede injuriar a los hippies y luego opinar desde una gran ignorancia acerca de temas tan profundos como el bautismo?
¿opinar desde la ignorancia no es, como mínimo, una actitud de mal gusto y que hasta podría llegar a ofender a los que conocen más del tema y volver ridículo ese texto, resultando así que algo de tan importante para mí se vuelva nulo, irrelevante, hasta motivo de burla?

siento que la opinión sobre el bautismo no corresponde a este esapacio.
pero si no la escribo aquí, dónde podría hacerlo?

quizás debería buscar otro espacio donde manifestar mis preocupaciones religiosas, aunque eso no implicaría dejar de exponerlas aquí, aunque de un modo informal, como he venido haciendo a través del tiempo a, b, c, d

quizás me molesta también haber mezclado el tema del bautismo con mi historia personal. al fin y al cabo, suelo hablar de mi vida, pero por muy por arriba... pero puse a mi madre como ejemplo porque para mí ella es el ejemplo de una buena persona simple, que no necesitó ni ir a la iglesia, ni mandar a sus hijos a un colegio católico para lograr dar el ejemplo de lo que es ser un buen cristiano...

y después, yendo al grano, ¿cómo puedo, faltándome tanto para ser una buena persona, tratar de convencer a los demás de bautizar a sus hijos?
siguiendo el tema de mi madre, ella jamás convenció a nadie de bautizarse por medio de las palabras, lo hizo con las acciones, al igual que la educación que nos dan nuestros padres se basa en el ejemplo de vida y no tanto en las palabras...

detesto justificarme, pero debo decirles a aquellos creyentes que puedan sentirse ofendidos por mi manera informal de referirme a un tema tan sensible, que mi único consuelo es que con todos los defectos queu tengo dios también me dio una gracia, que es el gusto por escribir, y bueno, aunque sean criolladas, están dichas desde el corazón y ojalá, a pesar de mi ignorancia, puedan tocar el corazón de los padres que mantienen a sus hijos en la oscuridad.

no soy una fanática defensora de la iglesia, del papa, ni nada, pero no me gusta la vergüenza que tienen algunos católicos que viven más o menos encubiertos... y lo he visto claramente: no puede ser que la gente tenga vergüenza de creer en Dios y al pasar por una iglesia junto a un conocido o amigo que no es católico manifieste un gesto de duda o incomodidad antes de persignarse, o que se lamente cuando su hijo nombra o pregunta repetidamente por la Virgen y ese lamento lo manifieste sólo porque está en compañía de gente que él cree que es atea...parece que seguir una tradición fuera pecado... y no es así.