y eso me atormenta
múltiples compromisos me lo impidieron.
mi deber ser es ser karateca y ama de casa.
mientras escribo la comida se quema... la literatura me impidió ir al karate.... qué barbaridad.
lo que me impongo no se impone por sí solo.
Un silencio que ni los perros rompen
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Pediste ser escuchado por quien
permanece en un silencio
que ni los perros rompen.
Hace 1 hora
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