jueves

creo que se nota que estoy bien

Hace unos días, el lunes, me desperté a las siete sintiéndome muy liviana y feliz, porque empezaba karate luego de siete semanas sin hacer. Y además, estaba el aire fresco del verano por la mañana cuando no hace calor... y ojalá todo el día fuera así.
Vimos con Beatriz los brotes de las plantas, en Villa Ortuzar, y seguro este calor habrá hecho brotar unos cuantos. Así que aunque sea invierno y todo esto un paréntnesis, podemos decir que la primavera comenzó.

Esta mañana me encontré tomando mate rodeada de un simpático kilombo en mi escritorio. Hacía tiempo que no tomaba mate, porque me caía mal, y tomaba té, hasta que un día dejé de tomar té, y pasé una semana sin tomar nada, ni mate ni té, solo leche con banana cortada. Entonces me di cuenta de que ya no quería el té, y si no quería el té, quería el mate. Así suceden los cambios, el valor se da como dijo Saussure, en contraposición de dos o más objetos, no? O algo así. Es tan importante este concepto!

El desorden del escritorio tiene sus razones.
Había unos libros que quiero poner a la venta en mercado libre, y estaban en una valija, y martin se llevó la valija y dejó los libros arriba del mueble, mis carteras están acá porque no entran en el perchero, los papeles del curso escribanos que debo archivas, las facturas que debo ordenar.

Tengo una larga lista de cosas para hacer

-pagar cuentas
-buscar un cheque y depositarlo -ya!
-comprar ingredientes para muffins
-comprar un regalo para silvana -ya le armé la lapicera cross pero falta el cartucho de recarga y envolver debidamente el regalo-
-dar vuelta las mesas de luz ¿hay algo más difícil que guardar esos libros que andan dando vueltas por ahí en la mesa de luz?
-lavar mis zapatillas
-separar toda la ropa que me regalaron y no me gusta
-que martin llame para que arreglen la pared de casa el consorcio
-meter libros en mercado libre
-imprimir factura deuda afip.


Cada año, más o menos cuatro personas me regalan ropa. De cinco prendas que me regalan, me gusta una y la uso. Y la otras cuatro x cuatro=16 -es mucho- quedan bollando por ahí.

Trabajo y cosas hogareñas, uh, me da mucha fiaca. Pero lo haré, y pondré un link por si a alguien le interesa. Creo que venderé todos los libros a 25 pesos, sin importar su calidad.

No me decido a vender los rompecabezas usados, creo que un rompecabezas es bien de familia, porque un amigo o familiar podría querer armarlo.


Anoche cambiamos de lugar en la cama.
Yo me puse del lado izquierdo y martín del lado derecho.
Por eso ahora las sillas de la ropa y y las mesas de luz están cambiadas
Además, sin que Martín pueda remediarlo, pienso dar vuelta los percheros y el mueble de la ropa también, y archivaré sus zapatillas que casi nunca usa.

¿Y el trabajo? La semana que viene daré 25 horas de clase, lo cual es Mucho!
Más los trámites de la facultad.

Pd. Mi psicólogo me dio el alta!



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ah bueno! dejaste lo mejor para el final! qué se siente que te digan que tenés el alta? y el concepto valor, cómo me costó! no sé si alguna vez lo entendí en realidad...

inés dijo...

Saussure es tan bueno como aburrido. Es demasiado simple, o demasiado explicativo, no lo sé pero es terrible. Los profesores te hacen un power point y te parece todo claro, después no entendés nada. ¿Qué se siente? No sé mi psicólogo es como un padre para mí así que me sentí triste y contenta a la vez de no verlo más, igual siempre puedo volver!